El último -y puede que único- grupo que considero de esencia auténticamente "Indie", desde sus inicios hasta su disolución, no es ni más ni menos que los ochenteros, Pixies.
Sé que ahora mismo puedo estar pecando de mitómana -porque lo soy...-, pero dudo mucho que hoy en día exista o pueda volver a existir, una mezcla semejante que dé un resultado semejante, ni parecido.
Para que el carisma de cuatro personas tan diferentes fructifique en un sonido tan milagroso como el de los Pixies, tiene que darse de nuevo eso... un milagro. Y los milagros existen en la música actual, pero no abundan.
Creo que para fusionar de tal manera el punk, el pop, el surf, y que suene tan sumamente sutil y sensual, se tendrían que alinear los planetas o algo así...
A la hora de colgar el vídeo de esta rareza -que es un auténtico temón- me estaba debatiendo entre poner la versión del "ayer" eléctrica, o la del "hoy" acústica. Como adoro las dos y ambas son muy recomendables para escuchar, ahí van:
Irene G.M.
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