Hoy, añado un año más a mi expediente vital, y no sólo entro en los 25
sino que entro renaciendo. He descubierto cosas nuevas y positivas de toda esa
gente que siempre ha estado cerca de mí. La vida
me ha sorprendido cuando de repente han aparecido apoteósicamente en el momento oportuno, y sin
hacer ruido han cambiado en gran parte el panorama. También he descubierto cosas nuevas,
positivas y no tan positivas, de mí misma. Este año ha sido una montaña rusa
(como todos los años, como para todo el mundo), pero me doy por satisfecha puesto que sí he conseguido un par de cosas importantes, en relación a hace un año exacto. Una: He vuelto a reir de verdad, con ganas, después de una racha bastante gris. Y dos: Creo que he aprendido -o estoy en ello- a hacerme feliz a myself, al igual
que se me da bastante bien hacer más felices a los que me rodean. Cosa que me
encanta. Con ello no pretendo dármelas de mejor persona ni mucho menos, simplemente es que... tengo un buen hobby.
Por otra parte, hasta hace poco, reconozco que no tenía planes de
futuro. Sí...soñaba, fantaseaba demasiado... Aunque tampoco me arrepiento.
Seguramente si no fuese una fantasiosa incorregible, este blog, por ejemplo, no
existiría como tal (o por lo menos tendría un nombre menos moñas...) Sin embargo sé que este año definitivamente van a cambiar muchas cosas. Comenzarán nuevos
proyectos, nuevas rutinas. Todo se volverá más serio… En definitiva, nuevas aventuras sobre las que voy a
tener que tomar todo el control. Y con todo lo que conlleven, ¡bienvenidas sean!
Hablando de fantasías y de aventuras, ¿qué mejor regalo que un cuento?
2 comentarios:
Pues muchas felicidades desde mi tercio de siglo .... (más 1)
Muchas gracias!!!
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